viernes, 12 de octubre de 2012

La producción de libros digitales en Argentina

El libro digital ya es una realidad bien instalada en la Argentina, y todo indica que ha llegado para quedarse. En el año 2011, se editaron 26 676 títulos nuevos, y nada menos que el 13% de ellos fue publicado en formato electrónico.(1) Esto representa un incremento notable respecto del año 2010, cuando el libro digital sólo alcanzó el 6% de presencia sobre un total de 22 781 títulos novedades.(2)

De esos más de 3400 libros digitales publicados en la Argentina en 2011, más del 92% fue puesto a disposición de los lectores a través de internet, y casi el 77% ofreció la posibilidad de descargar el archivo para poder conservarlo en soportes electrónicos, permitiendo su lectura mediante dispositivos como los e-readers.

Fuente: Sutherland Shire Libraries
Cada vez más editoriales argentinas eligen el formato electrónico: muchas han sido fundadas en el paradigma digital, mientras que otras optan por ofrecer ambas alternativas a sus lectores, tanto el ebook como el libro impreso. Esto amplía las posibilidades de llegar a públicos diversos, ofreciendo una nueva forma de distribución a editoriales de larga trayectoria y jóvenes editores dispuestos a emprender un proyecto propio.

Esto nos habla de una tendencia cada vez más pronunciada del sector y de una oportunidad que pronto será condición indispensable para obtener una sólida presencia en el mercado. En el marco de esta industria editorial en constante expansión, el libro digital también se abre paso de forma decidida, con un crecimiento acelerado y en pleno auge.

(1) Anexo estadístico publicado por la Cámara Argentina del Libro con fecha del 30 de junio de 2012. Disponible en la página web de la institución: Anexo estadístico 2011.
(2) Anexo estadístico publicado por la Cámara Argentina del Libro con fecha del 31 de diciembre de 2010. Disponible en la página web de la institución: Anexo estadístico 2010.

martes, 9 de octubre de 2012

Por qué contratar un servicio de digitalización

 En Origami Digital construimos cada libro desde las bases,
garantizando un resultado impecable y de la mayor calidad.

Existe más de un camino posible para convertir un archivo de texto (por ejemplo, un .doc), en un libro digital, como el formato ePub. La mayoría de ellas son automáticas y, en líneas generales, gratuitas. Sólo es necesario descargar un programa de internet y, con unos pocos clics, transformar un documento de texto en un archivo apto para ser leído cómodamente en un dispositivo para libros electrónicos o e-reader.

Entonces, ¿por qué pagar por un servicio de digitalización?

Convertir un archivo de extensión .doc en un ePub con un programa automatizado es lo mismo que corregir un texto con un corrector automático, o traducirlo mediante un software de igual tipo, sin supervisión alguna. Sencillamente, el ser humano todavía supera a la computadora en la realización de ciertas tareas que requieren de un ojo criterioso para su ejecución.

Los programas capaces de convertir un .doc en un ePub son, hasta el momento, sumamente deficientes en el procesamiento de los datos que reciben: generan una cantidad excesiva de información, devolviendo, por lo tanto, archivos con un amplio margen de error y un peso muy superior al necesario. Desde luego, la presencia de imágenes, tablas, o incluso algunos caracteres especiales incrementa las probabilidades de equívocos en el diseño final.

Los digitalizadores de Origami Digital realizamos un trabajo artesanal, con todos los cuidados que requiere una labor de conversión entre archivos tan distintos como un .doc y un ePub, asegurando que el resultado final sea impecable. Contamos con las herramientas necesarias para construir desde las bases un libro digital, garantizando un producto de altísima calidad, que no opaque con su factura la labor editorial previa.

miércoles, 3 de octubre de 2012

Del libro al archivo: formatos del libro digital


Libro electronico
Fuente: Johan Larsson
Existen numerosos formatos de archivos pensados para la confección de libros digitales. Sin embargo, hay dos formatos que han acaparado la producción editorial en el ámbito digital: ellos son el formato ePub y el formato Mobipocket.

El formato ePub


El formato de archivo más utilizado para el diseño y la publicación de libros digitales es el ePub. Fue desarrollado por el International Digital Publishing Forum y su nombre deriva de un acrónimo de la frase inglesa Electronic PUBlication (es decir, “publicación electrónica”). Se trata de un formato estándar de la industria: todas las librerías digitales en Argentina (Librería Santa Fe, Temátika, Grammata, Movistar) ofrecen únicamente libros ePub.

El formato también se caracteriza por su gran versatilidad: prácticamente todo lo que se haya diseñado para un libro impreso puede hacerse realidad en uno digital. Asimismo, este formato de archivo puede verse en una amplia gama de dispositivos: todo tipo de computadoras (tanto PC como MAC), tablets y smartphones (o teléfonos inteligentes).

Los archivos ePub no ofrecen restricciones de diseño en cuanto a la tipografía, la retícula, e incluso el color, lo cual puede apreciarse en dispositivos de pantalla LCD y a la vez permite a los editores estar preparados para el momento en que la tinta digital supere su actual desafío: dejar de ser una tecnología en blanco y negro para desplegar su abanico cromático.

El formato Mobipocket y el dispositivo Kindle, de Amazon


Libro digital
Fuente: daz smith
Amazon.com, la mayor librería virtual del mundo, anunció a fines de 2011 su arribo a la Argentina, Chile y Brasil, previsto para 2013. Este sitio web, que ofrece la posibilidad de comprar e-books por internet, cuenta con un dispositivo de lectura propio, el Kindle, y un formato de archivos propietario llamado Mobipocket. Sólo es posible adquirir libros Mobi en Amazon, y el único e-reader que puede leerlos es el dispositivo Kindle, el cual, a su vez, no reconoce el formato ePub.

Los dispositivos Kindle no están a la venta oficialmente en Argentina, y la librería digital todavía no cuenta con presencia legal en el país,  pero es indudable que su inminente llegada significará una nueva oportunidad para los editores locales.

martes, 2 de octubre de 2012

E-readers: dispositivos de lectura


La tecnología de los lectores de libros electrónicos ya ha madurado. Los e-readers han alcanzado un punto en el que no presentan desventajas con respecto al libro impreso, a la vez que ofrecen numerosos beneficios.

Libro digital
Fuente: goXunuRevieus

La tinta electrónica


Los lectores de e-books funcionan mediante un sistema de tinta electrónica que, respondiendo a impulsos eléctricos, muestra en pantalla la página solicitada.

La tinta electrónica, a diferencia de otras tecnologías como la clásica pantalla LCD, no emite luz. Por ello, no cansa la vista, y resulta sumamente confortable para la lectura.

Asimismo, es sumamente económica en términos de uso de energía: el dispositivo funciona con una batería que permite realizar unas 10.000 vueltas de página en promedio antes de agotar una sola carga.

La pantalla touch


Hoy en día, la mayoría de los modelos de e-reader de gama media y alta cuentan con pantallas con tecnología touch (táctil), lo cual permite a los usuarios navegar por el sistema sin necesidad de recurrir a los botones, y realizar anotaciones manuscritas sobre las páginas del libro mediante el uso de una stylus o estilete.

Marcas y precios


Libro electronico
Fuente: goXunuRevieus
En la actualidad, hay dos marcas de lectores de e-books disponibles oficialmente en Argentina: bq, que llegó a nuestro país de la mano de la empresa de telefonía Movistar, y Papyre, de la compañía española Grammata, comercializado por Eudeba.

También han ingresado al circuito comercial e-readers de distribuidores independientes, pertenecientes a compañías de diversa envergadura, desde Sony (Sony Reader) y Barnes & Noble (Nook), hasta fabricantes chinos que ofrecen productos de bajo costo y buena calidad. El precio varía entre los 700 y los 2500 pesos argentinos, en función de la marca y las funciones que ofrecen al usuario. Están disponibles a la venta en casas de electrodomésticos, de audio y en tiendas virtuales.